Joaquín Ibarra

El impresor español más conocido por los profesionales extranjeros nació en Zaragoza el 20 de julio de 1725. Durante su juventud residió en Cervera (Lérida), donde a la sazón de su hermano mayor Manuel, tenía a su cargo desde el año 1735, como primer oficial, dela Imprenta Pontifica Real de la Universidad. En ella alternó su aprendizaje tipográfico con los estudios universitarios, llegando a dominar el latín como los hombres doctos de su época.

Diole gran fama y prestigio  la feliz idea que tuvo de satinar el papel impreso prensándolo para quitar toda huella de los caracteres y demás elementos impresores cuando editó la obra de Don Quijote en 1780. Su basta cultura y sus grandes conocimientos técnicos y artísticos hicieron que fuera nombrado Impresos de Cámara del rey Carlos III, del Supremo Consejo de Indias, de la Real Academia Española y del Ayuntamiento de Madrid.

Las estampaciones de Ibarra se distinguieron por la nitidez de impresión y vigor de la tinta, fabricada por él mismo. Murió en Madrid el 13 de noviembre de 1785, entre sus obras están:

Psaterium Paraphrasibus illustratum, La Conjuración de Catalina y la Gerra de Jugurta, entre otras.